COMPLOT CONTRA EL APÓSTOL PABLO

1- La doctrina del rechazo y odio hacia el apóstol Pablo no es nueva, pues ya existía en el siglo 1 dentro del Imperio Romano.

Los enemigos del apóstol Pablo dicen que el Mesías vino para fundar un reino espiritual, no material, pero Pablo se empeñó en fundar iglesias físicas, con jerarquías dentro de ellas.

Esos enemigos del apóstol Pablo también le acusan de ser un total mentiroso, dicen que él nunca se convirtió realmente al Mesías, sino que fue la semilla para deteriorar el verdadero cristianismo, por tanto -según esos enemigos de Pablo- el cristianismo actual se ha convertido en un negocio gracias al apóstol Pablo.

Todos esos argumentos acusatorios contra el apóstol Pablo no son nuevos, sino que han sido tomados de los JUDIOS ANTICRISTIANOS, o de los lacayos y tontos útiles de esos judíos anticristianos, esos son sencillamente los mismos judíos falsos y mentirosos que en el siglo 1 acusaban falsamente a Pablo de cosas semejantes, e intentaban matarlo a toda costa, como podemos comprobar en el libro de los Hechos, pero lo peor de todo esto es que todas esas acusaciones son absolutamente FALSAS, sin una pizca de verdad, si los analizamos a la luz del Nuevo Testamento.

Veamos como esos judíos anticristianos odiaban a Pablo y conspiraban contra él para destruirle:

Fueron esos judíos anticristianos de Acaya los que atacaron a Pablo y lo condujeron al tribunal (Hch.18:12). Después, en otra ocasión, los judíos anticristianos tramaron un atentado contra Pablo antes de embarcarse hacia Siria (Hch.20:3). En otra ocasión esos judíos tramaron una conspiración para asesinar a Pablo (Hch.23:12). Estos judíos anticristianos acusaban falsamente a Pablo, y le buscaban desesperadamente para matarlo (Hch.25:2-3, 15). Las primeras iglesias cristianas fundadas por Pablo sufrían persecución por parte de estos judíos anticristianos (1Ts.2:14). Algunos gentiles también perseguían y maltrataban a los primeros cristianos, porque estos eran azuzados y soliviantados por los JUDÍOS ANTICRISTIANOS: "Pero los judíos incrédulos incitaron a los gentiles y les amargaron el ánimo contra los hermanos." (Hch.14:2).

2- Acusar a Pablo de que era un mentiroso, un falso apóstol, un falso cristiano, etc. era algo que ya existía en la época de Pablo, es una DOCTRINA DE DEMONIOS inventada por los principales enemigos del apóstol Pablo, del Mesías y de los primeros cristianos, y esos enemigos mortales eran los judíos anticristianos. En el libro de los Hechos, o en algunas de las epístolas de Pablo, vemos a esta sinagoga de Satanás persiguiendo con odio y saña a Pablo y a los demás cristianos, y desprestigiando a toda costa la autoridad apostólica de Pablo. Esos judíos anticristianos acusaban falsamente a Pablo de ser un falso apóstol, un traidor a Moisés y un mentiroso, ¡y lo mismo sucede ahora!, pues los mismos judíos anticristianos y sus lacayos judaizantes lanzan las mismas acusaciones falsas contra el apóstol Pablo, el cual era el PERITO ARQUITECTO de la Iglesia de Dios: "Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica." (1Co.3:10). Observa que Pablo era el perito arquitecto de ese gran edificio que es la Iglesia de Dios, él puso el fundamento, y ese fundamento es el Mesías y su Buena Noticia de la Gracia de Dios, la cual Pablo llevó con gran esfuerzo y dolor al mundo gentil greco-romano.

3- Pablo, que antes se llamaba Saulo, era un judío fariseo fanático y perseguidor de los cristianos, sin embargo, en el camino de Damasco se le apareció el Mesías glorificado siendo entonces escogido por el Mesías, y transformado totalmente por el propio Mesías glorificado, para enviarlo a los gentiles con la Buena Noticia de la gracia de Dios a las naciones (Hch.20:24), leamos las propias palabras del Mesías: "El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel; porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre." (Hch.9:15). En Romanos 1:1 Pablo dijo lo siguiente: "Pablo, siervo de Jesús , el Mesías, llamado a ser apóstol, apartado para la Buena Noticia de Dios". Por consiguiente, Pablo era un verdadero apóstol del Mesías, y la prueba de ello es que él tenía las SEÑALES DEL APÓSTOL: "porque en nada he sido menos que aquellos grandes apóstoles, aunque nada soy. Con todo, las señales de apóstol han sido hechas entre vosotros en toda paciencia, por señales, prodigios y milagros." (2Co.12:11-12).Por lo tanto, aquellos falsos cristianos que enseñan que Pablo no era un verdadero apóstol del Mesías están mintiendo descaradamente, y poniéndose al lado de aquellos judíos anticristianos que acusaban falsamente a Pablo, y querían matarlo.

4- Por lo tanto, uno de los objetivos principales de Satanás y de sus emisarios o apóstoles es, sin ninguna duda, ACUSAR FALSAMENTE AL APÓSTOL PABLO Y NEGAR SU AUTORIDAD APOSTÓLICA, y para ello Satanás utilizó en el siglo 1 a los judíos anticristianos (como ya he demostrado), los mismos judíos anticristianos que hoy en día también son utilizados por Satanás para atacar al apóstol Pablo. Todos aquellos que atacan a Pablo actualmente, diciendo que él era un embustero, un impostor o un falso apóstol, sencillamente son los mismos que lo hacían en el siglo uno, pero ahora se disfrazan de diferentes maneras, y con diferentes nombres.

5- Vamos a refutar de forma breve esa acusación falsa que los judíos anticristianos o sus lacayos lanzan contra el apóstol Pablo:

a) El Mesías Jesús vino para fundar un Reino espiritual, PERO TAMBIÉN MATERIAL. El Evangelio dice bien claro que Dios dará al Mesías el TRONO DE DAVID SU PADRE (Lc.1:33), El trono de David, según la Biblia, es el REINO DEL MESÍAS, DESCENDIENTE DE DAVID, SOBRE ISRAEL Y EL MUNDO ENTERO, y esto se refiere siempre a un reino FÍSICO y territorial, con súbditos, con leyes, un rey, y un gobierno; ¡de ninguna manera se refiere a un "reino etéreo" o "espiritual"!. Este trono de David será ocupado por el Mesías Jesús cuando él venga del cielo con gran poder y gloria, entonces él se sentará sobre su trono de gloria (que será el trono o reino de su antepasado David), y comenzará a gobernar sobre las naciones de la tierra con justicia, tal como el propio Mesías predijo en Mateo 25:31-46. Por lo tanto, el Reino del Mesías es un reino espiritual, pero también será un Reino físico o material, pues él gobernará a las NACIONES DE LA TIERRA CON "VARA DE HIERRO", CUANDO VENGA DEL CIELO (Ap.19:15), lo cual indica sin ninguna duda que ese Reino del Mesías también será un reinado físico, material, sobre las naciones de la tierra (Ap.2:26-27). Por lo tanto, esa doctrina de que el Reino del Mesías es solamente un reino espiritual, y no físico, es una tremenda MENTIRA PERVERSA, una doctrina de demonios, inventada por aquellas personas que no tienen ni idea del verdadero Evangelio ni del Nuevo Testamento, y el único propósito de aquellos que esgrimen esa falsa doctrina es atacar al apóstol Pablo, para intentar destruir su autoridad apostólica y su enseñanza, la cual está basada firmemente en la propia Doctrina del Mesías Jesús , como demostraré más adelante.

b) Pablo jamás fundó las actuales jerarquías eclesiásticas. Esa acusación de que Pablo fundó jerarquías eclesiásticas es una burda y falsa acusación diabólica, sin ningún fundamento bíblico ni histórico. Lo que dice el Nuevo Testamento es que Pablo ordenó a su discípulo Tito para ordenara o pusiera ANCIANOS (EN PLURAL) EN CADA CIUDAD donde Pablo había predicado la Buena Noticia. Esos ancianos de ninguna manera eran personas jóvenes, sino lo que significa la palabra, es decir, eran ANCIANOS, cristianos espirituales de edad avanzada, pero con ciertas cualidades morales y doctrinales, leamos atentamente lo que Pablo dijo a Tito: "Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé; el que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía. Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino hospedador, amante de lo bueno, sobrio, justo, santo, dueño de sí mismo, retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen." (Tito 1:5-9).

Si observamos bien esas palabras de Pablo vemos que esos líderes o ancianos de las iglesias eran TODO LO CONTRARIO DEL CONCEPTO DE JERARQUÍA ECLESIÁSTICA QUE HOY TENEMOS EN LAS IGLESIAS DE LA CRISTIANDAD. En primer lugar, esos líderes de las iglesias debían ser ancianos, y no personas jóvenes que pudieran trabajar para ganar su sustento. Sin embargo, los falsos maestros y muchas sectas apóstatas han falsificado esa palabra de "anciano", para hacernos creer el cuento de que los ancianos establecidos por Pablo en las iglesias eran personas jóvenes que tenían que recibir un salario a cambio de "pastorear a la iglesia", ¡esto es totalmente falso!, es una burda falsificación de la palabra "anciano". Los verdaderos ancianos cristianos que Pablo ordenó a Tito poner en las iglesias eran personas de edad muy madura, maridos de una sola mujer (no célibes), y con hijos creyentes sometidos a la autoridad de ellos. Pablo llamó después a esos mismos ancianos "obispos", indicando así que se refiere a la misma clase de personas. Estos ancianos u obispos tenían como trabajo EXHORTAR A OTROS CRISTIANOS CON LA SANA DOCTRINA, Y CONVENCER A LOS QUE CONTRADICEN ESA VERDADERA DOCTRINA. Esto es crucial, los ancianos de las iglesias del siglo 1 eran sencillamente MAESTROS BÍBLICOS, que enseñaban a otros cristianos la verdadera doctrina cristiana, cuidando así del rebaño que Dios los había encomendado alimentar con sus doctrinas, y no siendo de ninguna manera señores o papas sobre las iglesias, ¡esto es todo lo contrario de la jerarquía eclesiástica que vemos en las iglesias apóstatas de la cristiandad!, en todas esas sectas o iglesias apóstatas de hoy en día lo que vemos es todo lo contrario de los ancianos del siglo 1, pues lo que vemos es a pastores u obispos dictatoriales (muchos de ellos célibes), que dominan sobre el rebaño enseñando doctrinas falsas, y ejerciendo dominio de forma monárquica o dictatorial sobre otros muchos. El más claro ejemplo de este tipo de jerarquía anticristiana y falsa lo tenemos en la iglesia católica romana (la gran ramera), donde un monarca absoluto, célibe y dictatorial (el papa) se apoderó y enseñoreó del rebaño hace muchos siglos, pretendiendo tener el primado universal sobre todos los cristianos y el mundo entero. Este tipo de jerarquía diabólica y anticristiana también se ve, en menor grado, en otras muchas iglesias apóstatas.

Por lo tanto, acusar a Pablo de que él estableció o fundó las actuales jerarquías eclesiásticas es una terrible mentira diabólica, de la cual tendrán que dar cuenta delante del Tribunal del Cristo todos aquellos mentirosos que la esgrimen.

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